El Poder la Información en la 4T – Jairo A. Tell

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EL PODER DE LA INFORMACION EN LA 4ª. T.
Jairo A. Tell

Durante mucho tiempo se manejó el paradigma aquel de que el periodismo era el cuarto poder por su gran influencia y penetración en la sociedad. No pocos personajes se encumbraron hasta niveles insospechados por su cercanía con el gobierno en turno. Muchos de ellos se convirtieron entonces en verdaderos voceros por decir lo menos, ya que algunos más se convirtieron en verdaderos mastines para defender a ultranza lo indefendible. No obstante, paulatinamente muchos de estos personajes han perdido credibilidad e influencia entre la población. El surgimiento del internet y de las redes sociales marcaron los derroteros para la obtención de la información, muchos de los llamados “Influencers” cobraron relevancia, sobre todo en las campañas electorales contraatacando la desinformación y la guerra sucia orquestada desde los partidos y vertida en las pantallas, en la radio y en la prensa por los otrora líderes de opinión que cada vez más palidecieron ante la embestida brutal de las redes y la realidad.
En otro tenor, sería injusto no reconocer a los verdaderos periodistas y comunicadores que ejercen el oficio de manera seria y comprometida con las causas sociales, sin ambicionar el reconocimiento y sin la pretensión de congraciarse con los poderosos. La población de México hoy sabe que la información es poder y que una sociedad informada puede impulsar profundas transformaciones sociales y políticas. Por ahora, ya no más manipulación ni ocultamiento de la información, ya no más noticias sensacionalistas sacadas de contexto. A lo largo del siglo XX, el poder controlaba la información disponible para alimentar la conversación pública, pero, a partir de la alternancia en el poder, ese monopolio se ha desvanecido y hoy la información es poder para las personas y sus comunidades. Sensibles a los temas de interés público y en diálogo constante con la población, las autoridades pueden entregar información de manera proactiva por distintos medios, esto, es también una señal de madurez política y democrática al permitir a la población involucrarse en el control cotidiano del ejercicio del poder, es como se dice, gobernar obedeciendo.
La totalidad de la información debe estar disponible para toda la población, dada su relevancia en la conversación pública, de esta manera, se tiene la facilidad de resolver dudas. La información que emitan las diferentes dependencias del gobierno, en el caso de los programas sociales, debe ser autentica y dichas dependencias deben estar convencidas de que la información será útil para difundir los apoyos, ampliar su conocimiento entre la población y asegurar que estos responden a las necesidades de los beneficiarios. Y hay que ir más allá, en muchos casos la información debe salir de Internet y estar disponible en folletos, murales o debe ser divulgada en las comunidades y municipios que no cuentan con acceso a internet. La información de los 25 proyectos nos permitirá conocer las etapas de cada uno de ellos y las posibles fechas para ver los resultados esperados La transparencia proactiva es una forma de demostrar que “la transparencia es vocación no obligación”. Sería un gran acierto cumplir la promesa de transparentar proactivamente los 25 programas prioritarios del Gobierno Federal. Después de las urnas, proveer información es la mejor forma de dar certeza de que se gobierna con y para la población, de forma plural y con paso firme para combatir la desigualdad, la violencia y la corrupción en México. Hoy la población mexicana ha evolucionado y está cada vez más politizada, ya no cree más en los demagogos incrustados en los medios, cada vez más, exige una información real y certera para formarse un juicio. La desinformación se convierte en un despropósito que funciona a manera de un boomerang ya que la pérdida de credibilidad y de rating no es obra de la casualidad es resultado de un mal trabajo periodístico con un sesgo evidente para beneficiar a los de siempre. Lo mismo debe ocurrir en los distintos institutos políticos, la información honesta y suficiente, permitirá a los mismos, posicionarse y fortalecerse, de lo contrario están destinados al fracaso y la extinción, casos concretos el PRI y el PRD, que aún no terminan de asimilar la derrota y superar la resaca del mal trabajo realizado, merced a la desinformación y al autoengaño. Hoy un ciudadano informado, es un agente de cambio y un promotor de la sana convivencia, merced a su sentido de la justicia y la equidad, es un activo valioso para la nación.

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