COORDENADAS POLÍTICAS
MACARIO LOZANO R.
AMLO, OBLIGADO A RECTIFICAR ERRORES E INSISTIR
EN ACIERTOS A 6 MESES DE INICIADO SU SEXENIO
Las grandes transformaciones de regímenes siempre implican riesgos de muchos y graves errores de quienes las llevan a cabo, motivados por la urgencia de buenos resultados en poco tiempo, la resistencia de quienes se oponen a los cambios y las presiones de segmentos del propio campo para avanzar más rápido y profundizar más las modificaciones o arrasamiento completo de las estructuras del régimen derrotado.
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador cumplirá seis meses el próximo primero de julio, fecha en la que el mandatario hará un corte de caja en un informe que presentará con un resumen de los avances alcanzados, especialmente de sus anuncios sobre grandes obras de infraestructura, según lo anunció.
Durante este medio año de gestión lópezobradorista hemos presenciado mucha actividad del gobernante, como la lucha contra la corrupción en las nuevas estructuras administrativas (falta sancionar la del pasado), la meta de reducir los ingresos de los altos funcionarios, la ampliación de los programas sociales, anuncios de fuertes apoyos a los gobiernos estatales, la cancelación de la reforma educativa y del aeropuerto que se construía en Texcoco, y el anuncio de la ejecución de ese proyecto en Santa Lucía.
De la misma forma dio a conocer los megaproyectos de la refinería de Dos Bocas, Tabasco, el Tren Maya y el tren-interoceánico y el programa de reforestación, todos cuestionados severamente por grupos de derecha e izquierda, como en su momento lo fue la reforma constitucional para crear la Guardia Nacional, la entrega directa de apoyo a padres para guarderías, y el recorte presupuestal a áreas estratégicas.
Las resistencias al cambio no han permitido siquiera consolidar el objetivo de reducir en todo el gobierno los excesivos ingresos de los funcionarios, como son los casos del Poder Judicial y de los órganos con autonomía constitucional. Tampoco ha prosperado la supresión del fuero constitucional, ni el cambio para someter a la consideración de los mexicanos la permanencia o continuidad del presidente de la República.
Los primeros seis meses de un gobierno que desea transformar al país de cara a las conveniencias de los intereses de la mayoría es una gran oportunidad para una revisión de rigurosa autocrítica para detectar y corregir errores, subsanar omisiones, limitaciones e insuficiencias de las acciones institucionales y cancelar el riesgo de abusos de poder.
Sólo así la nueva administración podrá mejorar su eficacia, fortalecer planes, programas y acciones que buscan desmantelar al régimen neoliberal benefactor de reducidos, pero poderosos grupos empresariales, protector y partícipe de la corrupción, caracterizado por la ineptitud y desinterés en resolver los problemas sociales.
Todo esto es indispensable para implantar un sistema que aun dentro de una economía de mercado privilegie el bienestar de la mayoría, suprima privilegios, establezca un desarrollo con equidad y libere al país del flagelo de la inseguridad pública, los delitos y la violencia criminal impune.