1-El próximo mes el gobernador Alfredo del Mazo Maza deberá entregar a la Legislatura mexiquense su segundo informe de gobierno. Debe estar preocupado, porque logros importantes no presentará. Un mal equipo de colaboradores, con las excepciones de las reglas, no le ha permitido un ejercicio eficaz del gasto público.
Esta administración estaría peor si no fuera por algunos subsecretarios experimentados, capaces y con vocación de servicio, pero casi todos los secretarios carecen de esas cualidades.
2-Ya es tiempo de que los cuestionamientos por la inseguridad pública, el aumento de los delitos y de la violencia asesina se hagan también a los gobernadores y alcaldes, porque como ocurrió con Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, la culpa de esa situación se le carga exclusivamente a Andrés Manuel López Obrador, cuando el 70 por ciento de los delitos que se perpetran y más del 80 por ciento de los que no se denuncian, son del fuero común y es responsabilidad de los gobiernos estatales y municipales evitarlos y, en el primer caso, de investigarlos, esclarecerlos, perseguir y castigar a los delincuentes.