
*En la práctica hará un resumen de lo dado a conocer en sus conferencias matutinas.
GABRIEL L. VILLALTA
El presidente Andrés Manuel López Obrador rendirá al Congreso de la Unión el próximo domingo un informe de las acciones y avances conseguidos por su gobierno en los primeros nueve meses de gestión.
Los analistas políticos esperan un resumen de los anuncios hechos en las conferencias matutinas, aunque con un enfoque integral de los logros obtenidos en la estrategia para concretar la cuarta transformación.
El caso de político tabasqueño es peculiar porque hace 16 meses era un opositor calumniado, difamado y atacado con fiereza desde los medios informativos, para debilitar sus posibilidades de triunfo, como lo habían conseguido en 2006 y 2012. Ahora gobierna al país, también con críticas severas, infundadas la mayoría, por lo mismos participantes en la “guerra sucia” en su contra.
Nunca un candidato presidencial opositor había sido tan combatido por los medios informativos de cobertura nacional y sus principales conductores, columnistas y analistas como el ahora presidente.
Trece largos años de calumnias, en una feroz campaña de desprestigio no fueron suficientes para neutralizar y destruir la carrera de López Obrador, quien al final no sólo triunfó, sino también consiguió el respaldo de más del 50 por ciento de los votantes, lo cual no había conseguido ningún mandatario mexicano desde Miguel de la Madrid Hurtado en 1982.
Seis años antes (1976) José López Portillo, candidato presidencial del PRI, con el apoyo adicional oportunista del PPS y el PARM (ya desaparecidos) fue a la elección sin adversarios. Recorrió el país como ocurre con los boxeadores, que hacen rounds de sombra. Al final obtuvo el 91.9 por ciento de los votos.
López Obrador informará de cuanto ha dado a conocer ya a la opinión pública mediante conferencias de prensa que -a diferencia de sus antecesores, cuyos boletines eran ampliamente difundidos- ahora los medios presentan en forma fraccionada.
Entre los avances que consignará en su informe López Obrador estará el fin de la corrupción, la reducción de sueldos a los altos funcionarios, el abandono de los lujos, los viajes en vuelos comerciales, la cancelación de las obras de construcción del aeropuerto internacional en Texcoco y la creación de la Guarda Nacional y la autonomía de la Fiscalía General de la República (FGR).
La disminución a su mínima expresión del robo de gasolinas, las acciones para rescatar a Petróleos Mexicanos, y a la CFE, los programas destinados a los jóvenes para que estudien y para que aprendan un oficio, el respaldo a los ancianos, discapacitados, el programa de reforestación y se espera informe de las causas por las cuales no ha podido contener la tendencia al aumento de la inseguridad pública y los delitos, especialmente los de alto impacto.