
*Sin explicar porqué no pagó durante todo ese tiempo, sus abogados consiguieron que le cobren apenas el 1.3% de la deuda.
De la redacción
Diego Fernández de Cevallos no pagó durante 26 años el Impuesto Predial por sus numerosas, grandes y costosas propiedades en el Estado de Querétaro. Ese adeudo acumulado, incluyendo multas y recargos sumaba 984 millones de pesos.
Furibundo partidario del cumplimiento de la ley, omitió deliberadamente cubrir sus contribuciones al municipio de Colón, según lo difundió el alcalde Alejandro Ochoa Valencia.Y el mismo Ochoa Valencia dio a conocer hace unos días que, finalmente, del adeudo de casi mil millones solo pagará 12.
Ya había antecedentes de incumplimiento de pago del Impuesto Predial en Acapulco, Guerrero, donde tiene una propiedad de alto valor, en la zona exclusiva de Punta Diamante, regalada presuntamente por el gobierno estatal durante el sexenio de Francisco Ruiz Massieu, gobernador en ese tiempo de Guerrero y también cuñado entonces de Carlos Salinas de Gortari, aliado de Fernández de Cevallos.
El controvertido político derechista, quien tuvo descomunal influencia en el salinato, al grado de que como legislador federal le rendían pleitesía los representantes populares del PRI. Precisamente por eso le apodaron el “jefe Diego”, como se le conoce todavía.
Tampoco en el famoso balneario guerrerense pagaba el Impuesto Predial, pero cuando se difundió esa omisión argumentó que la persona encargada de cubrir la contribución no lo había hecho.
En Acapulco las autoridades se quejan en los mismos términos que Ochoa Valencia, pero no sólo de Diego Fernández de Cevallos, sino también de los dueños de grandes medios informativos de cobertura nacional y periodistas millonarios, de cuyas mansiones, además de no pagar el gravamen a la propiedad inmueble, cargaban a las autoridades el mantenimiento, la vigilancia y hasta el salario del personal doméstico.
DIEGO NO PAGÓ, DE ENTRADA, LO DE 21 AÑOS
Fernández de Cevallos reaccionó de inmediato al escándalo generado por la difusión de ese adeudo de casi mil millones de pesos. No negó ese pendiente, inclusive habló bien del alcalde de Colón, Querétaro.
Anunció que pagaría lo que se debe, para lo cual hablará con el alcalde Ochoa Valencia pero -aclaró- lo hará “de acuerdo a la ley”; es decir, lo de 5 años que son cuanto legalmente procede, no los 984 millones de pesos.
Conocedor de las leyes, Fernández de Cevallos sabe que los impuestos, incluyendo el predial, con todos sus accesorios, como les dicen a las multas, recargos e intereses, sólo pueden cobrarse los correspondientes a los últimos cinco años. No más.
Es decir, el candidato presidencial panista dejará de cubrir el gravamen a sus propiedades inmobiliarias de 21 años, porque de entre 1993 y 2013 no le podrán exigir ya el pago del adeudo.
En las entrevistas que dio a varios noticieros electrónicos pocas horas después de darse a conocer la situación, no explicó por qué dejó de cumplir sus obligaciones fiscales con ese municipio queretano durante dos décadas.