Javier Guzmán Calafell, Subgobernador del Banco de México (Banxico), afirmó que la política monetaria en México enfrenta una coyuntura complicada.
El funcionario explicó que, entre los factores de riesgo externos más importantes se encuentra la significativa desaceleración del crecimiento económico mundial y de la expansión del comercio global. La situación es particularmente difícil en el caso de la producción industrial, y de manera especial en el sector automotriz.
Esto ha sido resultado en buena medida de un entorno de incertidumbre, especialmente derivado de tendencias proteccionistas globales, en el cual se incluye la ratificación del acuerdo comercial de México con Estados Unidos y Canadá.
Como resultado de la debilidad de la actividad económica, muchos países han relajado su postura de política monetaria (reduciendo el costo del dinero/tasas de interés), implicando a su vez un relajamiento en las condiciones financieras globales (mayor endeudamiento).