Otra del Sexenio Peñista: 3 Mil 600 Millones de Pesos en Software para Penales, Se los Llevó el Viento

232
0
La corrupción ha permitido que los penales sean focos activos de delincuencia. Foto: Archivo

*Miles de millones de pesos se gastaron en tecnologías con sobreprecios.

De la redacción

En el anterior sexenio federal tiraron a la basura miles y miles de millones de pesos en contratos con sobreprecios excesivos de renta de sistemas de cómputo y software que no se instalaron, pero se pagaron religiosamente cada año. Sedesol fue ejemplo de ello.
No obstante, los daños patrimoniales se maquinaron en forma más sofisticadas que las maniobras de la “estafa maestra”, pues las empresas existieron y los contratos inflados fueron legales. De todos modos, fueron presentadas ya a la Fiscalía General de la República cerca de 50 denuncias penales, porque mucha tecnología pagada no se usó.
El saqueo al erario mediante esta modalidad corrió por cuenta de empresas propiedad de amigos de los altos funcionarios, e incluyó igualmente equipo obsoleto y pagos elevados por software de uso libre; es decir, que podían utilizar sin necesidad de pagar un solo centavo, pero se cubrieron sumas de miles de millones de pesos.
El área de la presidencia de la República, encargada de los temas de tecnologías de las telecomunicaciones e informática dio a conocer la serie de irregularidades y verdadero robo que cometieron altos funcionarios del pasado y sus amigos empresarios.
Las tecnologías contratadas en su mayoría no sirvió, y como muestra se puso el caso de un sistema comprado por el Centro de Inteligencia en Seguridad Nacional de (CISEN) en 3 mil 600 millones de pesos para bloquear (inhibir) las señales para teléfonos celulares en los penales: no sirvió o no se instaló, porque los dispositivos móviles siguieron funcionando.
La abrumadora mayoría de los sistemas de cómputo eran alquilados, pero adicionalmente se pagaba el mantenimiento con sumas superiores a los de las rentas ya infladas, cuando era obligación de los dueños ese mantenimiento. Fue un saqueo despiadado del erario. Además, lo operaban empresas privadas, con todos los riesgos para la información delicada que manejaban.
Hasta los servicios de fotocopias subrogados constituían una modalidad de robo, porque se pagaban fotocopias en equipos de fotocopiadoras que no funcionaban, porque no estaban ni conectados; es decir, no los habían instalado. En este mismo rubro, según la información difundida por la presidencia de la República, las empresas facturaban con sobreprecios excesivos fotocopias a color, que no imprimían por la sencilla razón de que las fotocopiadoras eran para blanco y negro.
Nadie se interesaba en verificar lo que se pagaba, porque las empresas eran de amigos de los funcionarios, y se trataba de una de las numerosas modalidades utilizadas para saquear al erario. Algunos contratos ya se cancelaron, pero en otros casos no se pudo, por lo que fueron renegociados con descuentos superiores al 50 por ciento sobre los que cobraban hasta 2018. Y sólo se pagan servicios que se prestan en condiciones pactadas.
Se rescató el manejo de la administración de estos servicios, que pagaban a empresas privadas. Los ahorros generales logrados representan más de 11 mil millones de pesos, y se evitó el pago duplicado de servicios, incluso se desarrollan sistemas con personal especializado de las dependencias.

Artículo anteriorMató el ‘Outsourcing’ el Derecho Laboral de Impugnar las Utilidades
Artículo siguienteAcaparan, Ocultan y Encarecen el Maíz: Subirá Precio de Tortilla; Piden Frenarlo