La ultraderecha mexicana no tiene temor al ridículo, y es trasnochada. El novedoso Frente Nacional Anti AMLO, ya desde las siglas se advierte un dejo de nostalgia tricolor, convocó este fin de semana a manifestaciones en 62 ciudades del país -incluyendo las capitales de los estados- para demandar la renuncia del presidente Andrés Manuel López Obrador. No fueron marchas propiamente sino protestas en vehículos, muchos de superlujo, pero tuvieron poco o nulo eco.
En algunos casos unos 20 automovilistas exigieron la renuncia inmediata de López Obrador, quien ha superado 31 millones de votos, pero lo peor fueron sus consignas propias de la etapa de la “Guerra Fría”. En cartelones expusieron: “Comunismo, fuera de México”, “No más socialismo en el Siglo XXI”. Nada más faltó que incluyeran en sus consigna lo de “Cristianismo sí, comunismo no”. En el caso de Toluca, la marcha interrumpió con el ruido de los cláxones lo que por semanas ha sido un descanso para los vecinos del centro de la ciudad, y de acuerdo con relatos sobre la caravana, “en los vehículos iban niños, pegados a las ventanas, seguramente felices de andar por fin en la calle, pero probablemente sin idea de a qué salieron”. Y algunos carros traían mensajes francamente pueriles, del estilo “AMLO, México no te quiere porque estamos hartos de que siempre tienes otros datos”.
¿De verdad están convencidos que en México existe un régimen comunista o socialista?. Es risible, pero estas corrientes ultraderechistas son financiadas por la ultraderecha plutocrática, quien promueve golpes de estado.