Caro, pero merecido le resultó al ahora exnotario 102 de Naucalpan, Horacio Aguilar Álvarez de Alba, haber ejercido violencia física y verbal al humillar a su esposa el 27 de mayo de este año, cuyas acciones fueron captadas en un video que circuló profusamente en las redes sociales. Le revocaron la autorización para ejercer.
El entonces fedatario y académico de la Escuela Libre de Derecho por la fuerza echó de su residencia a su esposa, quien en un descuido volvió ingresar al patio delantero del inmueble, pero las agresiones físicas no cesaron y tampoco las verbales.
Hubo reclamos de la sociedad, de grupos pro una vida libre de violencia para las mujeres y de algunos -pocos- actores políticos, pero especialmente de la diputada local mexiquense Karina Labastida Ochoa, para que le quitaran la notaría y le aplicaran la ley.