
*Empresas corruptas inflaban gastos con facturas falsas y perjudicaban a trabajadores.
GABRIEL L. VILLALTA
Mediante el uso de facturas falsas o sobre operaciones de compra-venta simuladas o infladas en sus montos, las empresas deshonestas evadías el pago de impuestos. Robaban al fisco, con efectos nocivos en otros sectores.
Con estos documentos apócrifos las compañías reducían artificialmente el monto de sus utilidades sobres las cuales debían pagar los gravámenes correspondientes, pero con ello perjudicaban igualmente al personal a su servicio, de acuerdo con un análisis de “El Espectador” a la información difundida por las autoridades sobre las denuncias penales contra los primero 43 evasores.
La inflación de los gastos mediante el uso de facturas falsas; es decir, por operaciones de compra-venta no efectuadas, inexistentes y con dolo, impacta y reduce el monto de las ganancias de las empresas.
Con ello pagan menos impuestos, pues no debe olvidarse que todo lo que se está difundiendo sobre la evasión del pago de gravámenes se refiere exclusivamente al Impuesto Sobre la Renta (ISR), aplicable sobre utilidades, no sobre los ingresos brutos de las compañías.
Con la reducción o evasión total en el pago de impuestos sobre las ganancias se perjudica a los trabajadores, porque reciben un porcentaje de las utilidades de los patrones, y si reportan menos utilidades, reparten menos.
Este aspecto no se examina a fondo, incluso los asalariados consideran un tema ajeno este de la evasión fiscal de las compañías, cuando son directamente afectados en sus ingresos por estas maniobras fraudulentas y de mala fe de sus empleadores.
Un ejemplo para ilustrar la situación: si una empresa debe repartir entre sus trabajadores 10 millones de pesos de utilidades, si con facturas falsas eleva sus gastos, puede bajar a cinco millones de pesos el monto repartible, inclusive puede declarar cero ganancias y hasta pérdida, con lo cual repartiría la mitad o nada.
Sorprende por eso que los sindicatos se muestren indiferentes ante la información de los fraudes fiscales con facturas falsas y se comporten como si esto no afectara directamente los intereses de sus afiliados en el cobro de participaciones en las utilidades de las empresas.