El Banco Mundial (BM) advirtió que la pandemia de COVID-19 representa una amenaza para el avance de la educación en todo el mundo, con un alto costo a largo plazo sobre el capital humano y el bienestar.
El BM advirtió es necesario que los gobiernos realicen un esfuerzo considerable para contrarrestar el efecto del cierre “prácticamente universal de las escuelas de todos los niveles”, el cual implica pérdidas de aprendizaje, aumento de la deserción escolar y mayor desigualdad, a lo cual se suma el impacto (reducción) en la oferta y demanda educativa, resultado del daño ocasionado a los hogares por la recesión económica generada por las medidas de control de la pandemia.
El organismo internacional destacó que si los países reaccionan con rapidez, pueden mitigar el daño e incluso reconstruir sus sistemas educativos con importantes mejoras en áreas como evaluaciones, pedagogía y tecnología.