*Los vivales envían a potenciales víctimas mensajes a nombre de la S. de Finanzas.
De la redacción
Vivales intentan sorprender y defraudar a los gobiernos municipales, mediante el ofrecimiento de fondos públicos estatales, para lo cual usurpan la identidad del titular de la Secretaría de Finanzas, alertó oficialmente la dependencia del Poder Ejecutivo del Estado, Rodrigo Jarque.
Con el uso de tecnología de las telecomunicaciones este tipo de delincuentes de cuello blanco han estafado a ayuntamientos, especialmente a los de municipios rurales y pequeños, urgidos de ingresos adicionales, con la agravante de que ni siquiera son denunciados por el temor al ridículo, pues los alcaldes no quieren aparecer como tontos, además de la imposibilidad de recuperar el dinero que entregan.
La Secretaría de Finanzas recordó a las autoridades municipales que todas las asignaciones o radicaciones de recursos se hacen con documentos oficiales, por vías formales, como lo marca la legislación aplicable y nunca por mensajes por teléfonos móviles inteligentes.
Anticipo que presentará denuncia penal ante la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), para que por conducto de la Policía Cibernética investigue y esclarezca este problema, aunque los gobiernos municipales no han dado a conocer las estafas o fraudes.
El “modus operandi” consiste en enviar mensajes por medio de teléfonos celulares, a nombre del secretario de Finanzas, con ofrecimientos de entrega de fondos extraordinarios para enfrentar la pandemia, pero invariablemente a su nombre solicitan el deposito de sumas de dinero en cuentas bancarias que son de los defraudadores.
Los alcaldes sufren todo tipo de intentos de fraude, incluso de extorsiones para protegerlos de supuestos desvío de fondos y cuadrarles sus cuentas y evitar el ejercicio de la acción penal. Como la mayoría tiene problemas para acreditar gastos y lo saben, son víctimas fáciles del engaño y entregan fuertes sumas de dinero.
Cuando se enteran de la estafa nada pueden hacer, porque los depósitos ya fueron retirados, las cuentas bancarias de los delincuentes, cerradas y no se atreven a denunciar para no ser después víctimas adicionales de burla: los delitos quedan impunes.
Los presidentes municipales también son víctimas de otros tipos de vivales: publicaciones que entregan premios a los mejores alcaldes o de consultoras que igualmente supuestamente hacen encuestas a la población en las cuales opinan y evalúan el desempeño de sus autoridades.
Les exigen una contribución para ubicarlos en los primeros lugares, inclusive se atreven a entregar premios, cuyas ceremonias y consumo de comida y bebidas, incluyendo las embriagantes, deben cubrirlas las tesorerías municipales.
