*Necesidades de mayor eficacia y posibles candidaturas, explican cambios.
De la redacción
En una reestructuración a fondo del gabinete estatal, salieron del mismo Alejandro Ozuna Rivero, Maribel Cervantes Guerrero, Alejandro Fernández Campillo, Andrés Massieu Fernández, Rocío Díaz Montoya, Evelyn Osornio Jiménez y Raymundo Martínez Carbajal.
Los cambios, que involucraron a cerca de la mitad del primer círculo de colaboradores del gobernador Alfredo del Mazo, se tradujeron en un reacomodo de los grupos priistas al interior del Poder Ejecutivo, con miras al trabajo de la segunda mitad del sexenio, pero también de cara al proceso electoral local y federal en el Estado del próximo año, en el cual el PRI partirá con gran desventaja, según analistas de “El Espectador”
En este escenario se incorporaron al gabinete delmacista Ernesto Nemer Álvarez, quien vuelve a la Secretará General de Gobierno; Rodrigo Martínez-Celis a la Secretaría de Seguridad, Rafael Díaz Leal Barrueta a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obra; Gerardo Monroy Serrano a la Secretaría de Educación.
De la misma forma, Mercedes Colín Guadarrama a la Secretaría del Campo; Marcela González Salas amplió su área de responsabilidades, al agregarse a la Secretaria de Cultura la de Turismo; Luís Limón Chávez a la Secretaría de Movilidad y María Isabel Sánchez Holguín a la Secretaría de la Mujer.
Estos movimientos ocurrieron a la mitad del sexenio, cuando ya el gobernador Alfredo del Mazo Maza gastó cerca de un billón de pesos, sin grandes resultados satisfactorios para los mexiquenses, lo cual explica su ubicación entre los mandatarios estatales menos respaldados por los gobernados.
El gobernador explicó que la reestructuración de su gabinete tiene como finalidad “mejorar la administración estatal” y la necesidad de adaptarla a las condiciones generadas por la pandemia, además de reducir gasto con la fusión de secretarías y la supresión de 10 subsecretarías.
El reacomodo en el gabinete estatal debilitó la posición de algunos grupos del PRI, al salir sus miembros, como es el caso de Aarón Urbina, de Tecámac, con la renuncia de Rocío Díaz Montoya. Los allegados a del Mazo Maza que dejaron sus cargos buscarán ser candidatos a alcaldes, diputados locales o federales el próximo año, especialmente para Huixquilucan.
