
*Un voto de los magistrados impidió a Calderón disponer de un partido.
De la redacción
No haber identificado a donantes de un millón 061 mil pesos del millón 767 mil pesos recaudados para formar el partido “México Libre”, impidió a Felipe Calderón y Margarita Zavala, su esposa, obtener del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) el registro anhelado.
El caso se resolvió en un ambiente anímico social adverso a Felipe Calderón, por el encarcelamiento y juicio en Estados Unidos de Genera García Luna, su secretario de Seguridad Pública, acusado de haber protegido al “Cartel de Sinaloa”, lo cual dio lugar que se calificara a su sexenio de narcogobierno.
También estuvieron las versiones de que García Luna financió a campaña para obtener firmas para que Margarita Zavala fuera candidata presidencial independiente, en 2018; y la difusión de actos de corrupción en favor de empresas del sector eléctrico en el sexenio de Felipe Calderón, el principal impulsor del partido México Libre.
En votación dividida y apretada de cuatro votos a favor de la confirmación de la negativa y tres por devolver el caso al INE para que investigara la identidad de los donantes (ninguno pidió revocar la resolución del Instituto).
Reyes Rodríguez, el magistrado vinculado a la familia Calderón Zavala, fue el más enfático en abogar por devolver el caso al INE, para que investigara e identificara a los donantes, lo cual debieron hacer en tiempo y forma los dueños de la organización que, como asociación política, se denominó “Libertad y Responsabilidad Democrática”.
La negativa del TEPJF benefició electoralmente al PAN, pues “México Libre” no iba a quitarle votos al PRI, ni al PRD o MC, sino al panismo.
El Tribunal revocó, en cambio, la negativa del INE a otorgar registro a los partidos Redes Sociales Progresistas, de Elba Esther Gordillo, y a Fuerza Social por México, de Pedro Haces, a quienes concedió registro; y confirmó el del Partido Encuentro Solidario (PES), de Eric Flores. Esta organización se llamaba Partido Encuentro Social, pero perdió su registro en 2018.
De esta forma, serán tres partidos más los que participen en las elecciones legislativas federales y locales del próximo año. Y por su condición de nuevas organizaciones políticas, no podrán aliarse con otros partidos. Deben contender por separado.