Guillermo Prieto Treviño, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), anticipó que la recuperación en la venta de autos nuevos en el país será gradual y lenta, tomará tiempo; sin embargo, gracias a la capacidad de adaptación de los consumidores y distribuidores, la caída ocasionada por el COVID-19 y el confinamiento será menor a lo anticipado.
De acuerdo con el directivo, la AMDA proyecta que al cierre del año se habrán comercializado alrededor de 945 mil unidades nuevas, lo cual representa una disminución de 28.0%, respecto a las ventas de 2019.
Aunque son tiempos difíciles para los más de 2 mil 400 negocios familiares que representan las agencias-distribuidoras, Prieto Treviño añadió que a inicios de la pandemia el panorama arrojaba una contracción cercana al 50.0%.
Para finalizar, el máximo representante de los distribuidores de autos en el país señaló: “el modelo de negocio actual ya no podrá seguir vigente por mucho tiempo, por lo que debemos adecuarnos a la nueva realidad y no será fácil en el corto plazo ante un ambiente tan complejo”, en clara referencia a la comercialización de vehículos por Internet.
