
*Al Estado de México le favoreció incorporar el factor población a esa Ley.
GABRIEL L. VILLALTA
Dos de los gobernadores de la llamada “Alianza Federalista” como legisladores federales aprobaron en 2007 la última reforma relevante a Ley de Coordinación Fiscal, impulsada por Felipe Calderón Hinojosa, la cual es ahora motivo de desencuentro entre 10 mandatarios estatales y la Federación.
Silvano Aureoles Conejo, mandatario de Michoacán; y José Rosas Aispuro Torres, de Durango, senador del PRD por Michoacán; y diputado federal plurinominal por el PRI ese año, respectivamente, dieron su respaldo a la iniciativa calderonista que ahora critican con severidad, según una investigación de “El Espectador”.
El gobernador duranguense era entonces cuadro del PRI, partido al que abandonó después para ser postulado por el PAN y ganar la gubernatura. Aureoles Conejo, uno de los gobernadores peores calificados del país, ganó en 2006 la senaduría remolcado por la popularidad y liderazgo de Andrés Manuel López Obrador, en su primera campaña presidencial, como perredista.
En septiembre de 2007 los dos ahora gobernadores votaron a favor del cambio a la Ley de Coordinación Fiscal. José Rosas Aispuro Torres era diputado federal de representación proporcional; y Aureoles Conejo, senador.
El mismo día se reformaron las leyes Federal de Presupuesto, Responsabilidades Hacendarias; y Ley Orgánica de la Administración Federal. En algunas columnas políticas de los diarios de circulación nacional se sostiene que Javier Corral también voto esas reformas, pero el gobernador de Chihuahua no era legislador en 2007. Fue diputado federal en la segunda mitad del sexenio de Felipe Calderón Hinojosa.
En la Cámara de Diputados las reformas se aprobaron sin un solo voto en contra. Apenas un voto de panista fue en abstención. En el Senado de la República no hubo un solo voto en contra.
LA RELEVANCIA DE LA REFORMA
Desde 1978, en tiempo de José López Portillo, cuando comenzó a trabajarse en la Ley de Coordinación Fiscal de la Federación con los estados se hicieron adecuaciones a esa legislación, pero fue en 2007 cuando se introdujo un factor que modificó en forma importante la distribución de las participaciones a las entidades federativas de los ingresos federales, motivo de inconformidad ahora de 10 mandatarios estatales.
Esos cambios a la Ley de Coordinación Fiscal aprobados por Aureoles Conejo y el mandatario duranguense, para introducir el factor poblacional al esquema de distribución de las participaciones a estados, es lo que ahora rechazan los 10 gobernadores aliancista, de la que ellos forman parte.
Esa reforma fue impulsada, en mucho, por el entonces gobernador Enrique Peña Nieto, y permitió al Estado recibir más fondos, por su crecida población y un alto porcentaje de pobres.