*De nada le sirvió su costosa plantilla de presuntos grandes jugadores.
De la redacción
Tres de los cuatro equipos con mayores inversiones del futbol mexicano ya no están en la liguilla. Monterrey ni siquiera pudo ganar el repechaje frente al Puebla, mientras Tigres naufragó ante el Cruz Azul.
Los dos equipos neoloneses fracasaron, pero por la conjugación de una larga serie de circunstancias el mayor fracaso fue el América, el orgulloso y rico equipo de Emilio Azcárraga Jean.
Inició el torneo, como ocurre siempre, como el gran favorito para llevarse la corona; sobre todo, cuando quedó entre los 4 clubes con calificación directa a la liguilla, pero quedó eliminado en cuartos de final por un equipo que llegó a esa fase al ganar en el repechaje.
El América perdió los dos partidos de la etapa inicial de la liguilla, con un marcador global de tres goles a uno, pero lo peor es que jugó su peor partido en sus encuentros con el acérrimo rival.
No sólo fue eliminado, sino que perdió la serie de dos juegos considerada el clásico de los clásicos, con resultados que no esperaban nunca sus partidarios, ni los seguidores del Guadalajara.
El mal desempeño del equipo que lleva el nombre de la capital de Jalisco y la circunstancia de que tuvo que ganar su calificación a la liguilla en repechaje, lo hacían víctima segura del club propiedad de Televisa.
El triunfo de Chivas en el primer partido no preocupó a los americanistas, ni generó demasiado optimismo en los del Guadalajara. Se tomó como un resultado circunstancial, que se revertiría fácilmente en la capital del país.
Al final resultó todo lo contrario: Chivas no sólo volvió a derrotar a las Águilas, sino que el domingo 29 del pasado mes le anotó dos goles, para sepultar las esperanzas de éstas de ganar el título, al perder los dos clásicos con una diferencia de 72 horas.
De nada le valieron al América sus grandes y caros jugadores, ni la condición de local. Fue el equipo que sufrió el mayor fracaso, poniendo incluso en riesgo la permanencia de Miguel “Piojo” Herrera en la dirección del equipo, pues perder y ser eliminado por el odiado rival, que tuvo un mal desempeño en la fase regular del torneo no es cosa de todos los días.
CRUZ AZUL, YA NO SORPRENDE
Por su parte, el equipo Cruz Azul fue eliminado en lo que no fue una sorpresa para sus seguidores, quienes se han acostumbrado a ver a su quedarse siempre sin ser campeón aun cuando las circunstancias lo marquen como favorito. Así la derrota 4-0 en el partido de vuelta contra los Pumas no fue sino la confirmación de la mala suerte que arrastra el equipo en liguillas. Lo que no puede negarse es que una semifinal con 8 goles, fue sumamente atractiva y emocionante para los aficionados y seguidores de ambas escuadras. La final la jugarán Pumas y León.