1-La oposición criticó el nombramiento de la senadora con licencia Delfina Gómez Álvarez como secretaria de Educación Pública, mientras miembros del gabinete presidencial y el SNTE la felicitaron. Los más groseros y hasta misóginos fueron Demetrio Sodi, quien comentó que la designación de la ex alcaldesa de Texcoco fue como si “hubieran nombrado papa a un cura de pueblo”, mientras el perredista Fernando Belauzarán criticó que la oriunda de Texcoco “habla con faltas de ortografía”.
2-Es deseable que la mexiquense tenga un desempeño a la altura de las exigencias de la educación de México. Es licenciada y tiene una maestría en pedagogía y tiene otra maestría en administración de instituciones educativas.
3-Por otra parte, las descalificaciones de las cuales ha sido objeto -algunas descaradamente misóginas- no han motivado la reacción de los colectivos que buscan erradicar la violencia de genero contra las mujeres en todos los aspectos de la vida. Así las cosas.