El pasado lunes primero de mes, el presidente Andrés Manuel López Obrador se convirtió en el segundo jefe de Estado en sostener un diálogo en línea con Joe Biden, presidente de la primera potencia económica, militar y tecnológica del planeta, después del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Los tres encabezan gobiernos de América del Norte y sus países forman parte del TEC-MEC, por ello la prioridad del mandatario estadounidense al contacto con sus pares fue interpretada por los analistas internacionales como prueba de la importancia que Biden otorgará a la región.
La conversación por Internet no arrojó resultados espectaculares, pero nadie los esperaba. En cambio, los adversarios del mexicano deseaban un mal saldo, lo cual tampoco sucedió y por ello este primer contacto, que podría considerarse un gran gesto político del mandatario norteamericano, no fue presentado como tal por los medios nacionales.