*El religioso se ha visto envuelto en escándalos políticos desde hace tiempo.
De la Redacción
El obispo emérito de Ecatepec, Onésimo Cepeda, no podrá ser candidato a diputado local de mayoría, ni de representación proporcional, porque está impedido por la legislación electoral y la de Asociaciones Religiosas, pues aun y cuando haya renunciado a ser obispo de la Diócesis citada, no ha abandonado su condición de ministro de culto religioso.
De todos modos, la sola mención de que podía ser representante popular por el distrito 21 de Ecatepec, revivió las polémicas que su comportamiento como jerarca de la religión católica generó en su tiempo.
Volvió a recordarse que era la antítesis de la vida de Cristo y de la corriente del catolicismo “opción preferente por los pobres”. Cuando se hablaba de esto decían que el obispo era de la corriente de “la opción preferente por los ricos”.
Le gustaban los lujos que pagaran otros. Carlos Ahumada, el empresario argentino que le daba dinero a René Bejarano, narró que Cepeda en una ocasión le pidió una lujosa camioneta para regalarla a su mamá (del religioso), y que el obispo también pedía a su amigos multimillonarios vino tinto del que una botella cuesta 50 mil pesos.
Ahumada está resentido con Cepeda y lo considera desagradecido, porque cuando el empresario estuvo preso, jamás lo visitó en la cárcel, ni siquiera le hizo una llamada telefónica. Todo eso se recordó hoy, por su intento de ser diputado local.