1-De pena ajena lo del PRD: en 2006 ganó la presidencia de la República, pero con un megafraude se las robaron, y ya para 2018 por poco pierde su registro por su escasa votación. Ahora para salvarse este año, su cúpula, oportunista y sin principios, se alió con el PRI y al PAN, quienes antes eran sus adversarios irreconciliables.
2-En Guerrero ganaron la elección de gobernador en 2010, pero ahora tienen una preferencia electoral del 2 por ciento, por lo que muy pocos votos podrá aportarle a su aliado, el PRI, en la elección de gobernador del 6 de junio.