*La postura del congreso local en el caso ‘García Cabeza de Vaca’ agrava la situación
De la Redacción
Si la Constitución establece que las resoluciones o fallos de las cámaras del Congreso de la Unión, (de senadores y Diputados Federales) son inatacables y la última quitó el fuero constitucional al gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, para poder ser llevado ante la justicia por una serie de delitos, el mandatario ya no tiene fuero.
No obstante, la Legislatura Local de ese estado, dominada por el PAN, partido en el cual milita el acusado, sostiene que a ella le corresponde terminar el proceso y no desaforará a su compañero de partido, ello creó una crisis y enfrentamiento entre la diputación federal y la local.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) desechó la controversia de inconstitucionalidad del desafuero presentada por la Legislatura tamaulipeca, y validó lo actuado por los diputados federales, por lo que de insistir el congreso de Tamaulipas en su posición podría caer en desacato.
Esa es una causal de desaparición de poderes y una prueba más del uso perverso del fuero constitucional, que en este caso y de ser ciertas las acusaciones contra García Cabeza de Vaca, estaría dando impunidad a un delincuente.
