*Los escándalos de corrupción e ineptitud de Calderón parecen haber sido olvidados por los grandes medios que éste benefició.
De la Redacción
El caso del astillero de Vigo, España, comprado a la empresa “Hijos de I. Barrera” por PEMEX durante el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, es otro ejemplo del menosprecio por los intereses del país mostrado en numerosa ocasiones por el ex presidente panista.
PEMEX adquirió 51 por ciento de las acciones de esa empresa que estaba quebrada, pero y a pesar de tener la mayoría accionaria dejó que administraran la compañía los socios minoriatrios, esos mismos que la habían llevado a la ruina.
Para reactivarla, PEMEX le encargó construir un enorme barco, pero de todos modos el astillero cayó de nuevo en quiebra. Mientras operó con ganancias a PEMEX no le dieron un solo euro de dividendos. Todavía, después, los socios minoritarios querían recomprar las acciones, pero a un precio que casi eran regaladas.
Casos como este abundaron en el gobierno federal durante el largo período neoliberal (de mayor duración que la dictadura porfirista), todavía le generan problemas al actual gobierno y se los generarán a los próximos.
