*Desplazó y prácticamente borró del mercado del sector público a “Casa Saba”.
GABRIEL L. VILLALTA
Entre el 2013 y el 2018 la empresa “Fármacos Especializados S.A. de C.V.”, de José Antonio Pérez Pérez, ahora de 80 años, facturó al sector público federal de salud 107 mil millones de dólares.
Fundó la compañía al final del sexenio de Vicente Fox Quesada, pero su auge, atribuido por las nuevas autoridades de salud del país al tráfico de influencia y la corrupción, comenzó con el gobierno de Felpe Calderón y tuvo su apogeo en el de Enrique Peña Nieto, de acuerdo con un análisis de “El Espectador” a la información del gobierno de la República.
José Antonio Pérez Pérez se convirtió en tampoco tiempo en el zar de las ventas de medicamentos, equipos médicos y material de curación, y los 107 mil millones de pesos pagados por las autoridades federales fueron sólo una parte del negocio.
Las relaciones con los políticos y poderosos en los gobiernos le permitieron concentrar igualmente un alto porcentaje de las medicinas compradas por los gobiernos estatales, aunque no hay información sobre los montos de esos contratos.
Cuando “Fármacos Especializados” fue fundada, la principal proveedora de medicamentos al sector público federal era “Casa Saba”. Fue desplazada por la empresa de Pérez Pérez, sobre quien pesan sospechas de que, en realidad, sólo era operador de políticos y altos funcionarios públicos, los verdaderos dueños del negocio basado en corrupción.
En conferencia de prensa, el secretario de Salud, Jorge Alcocer, sostuvo que el problema en las compras de medicamentos es que los vendedores no los producían, sino eran intermediarios y vendían con sobreprecios exagerados; por si fuera poco, ni siquiera están acreditadas las entregas de todo cuanto cobraban.
Los laboratorios del ramo farmacéutico no vendían directamente. Las compras se realizaban a través de una red de traficantes de influencias, quienes controlaban el mercado, con enormes utilidades que afectaban no solo la saludo de la población, pero también las finanzas públicas: se pagaba dinero de más, pues se adquirían productos con precios muy superiores a los del mercado al menudeo.
La empresa de Pérez Pérez fue inhabilitada en 2019, por prácticas irregulares, y desde entonces poco se habla de la misma. Sólo se sabe que cambio o iba a cambiar de razón social, para continuar vendiéndole de los gobiernos estatales encabezados por políticos del PRI y del PAN.
También prácticamente desapareció “Casa Saba”, reducida por “Fármacos Especializados” a su mínima expresión en el mercado de las medicinas del gobierno federal; sobre todo, cuando uno de sus pilares pereció en un accidente de aviación.