1-“El Universal” publicó ofensivas declaraciones de un actor que se hace llamar “Lalo” España. Dijo: “voté por un imbécil, inepto y corrupto. Me arrepiento”. La falta d respeto y grosería hacía la figura presidencial es evidente, pero lo paradójico y ridículo es que en las mismas páginas de ese diario hubo señalamientos de que no hay libertad de expresión en México y de que AMLO busca intimidar a los medios informativos y periodistas.
2-Muchos columnistas en todos los medios opinaron lo mismo, por la exposición en Palacio de Gobierno de mentiras publicadas en medios impresos y electrónicos. Todos los ataques coincidieron en que esto es una amenaza a la libertad de expresión, pero los señalados -como mentirosos que sí son- no desmintieron que la información y comentarios por los cuales se les señaló eran falsos. Es decir, la información publicada sobre ellos es cierta: mintieron. Eso es lo que no les gustó.
