*Si no denuncian la corrupción, serán ellos quienes respondan.
De la Redacción
Los próximos alcaldes mexiquenses deben exigirle cuentas a sus antecesores, para evitar que los actos de corrupción queden impunes o que después tengan ellos que responder por irregularidades, como está ocurriendo en estos momentos en el ayuntamiento de Teotihuacán.
El alcalde no puede disponer de los fondos públicos del ayuntamiento pues le cancelaron los sellos fiscales a la comuna, porque su antecesor se apoderó de 23 millones de pesos, descontados de impuestos a los empleados y no enterados a la SHCP, como debió hacerse por obligación legal.
Ahora el problema lo tiene el presidente municipal Jaime Heredia Ángeles pues no importa que la deuda fiscal sea del anterior gobernante, él debe pagar los 23 millones; y si no lo hace, puede terminar en la cárcel, mientras el anterior alcalde ni sufre, ni se acongoja, porque no fue denunciado a tiempo.