Macario Lozano R.
El extravío, falta de información y autoengaño de las cúpulas del PRI, PAN y PRD llegó a tanto que se fijaron como objetivo estratégico en las elecciones legislativas federales ganar la mayoría para negarle fondos al Ejecutivo Federal en el Presupuesto de Egresos de la Federación para los programas sociales los tres últimos años del sexenio.
Se les olvidó que los recursos presupuestales para esos programas ya no pueden suprimirse, ni siquiera reducirse, porque están garantizados en la Constitución, lo cual obliga a mantener esas partidas e incrementarlas como mínimo al nivel de la inflación del año previo.
No ganaron la mayoría de la Cámara de Diputados Federal, pero aun cuando la hubieran ganado, su objetivo de cancelar o reducir los programas sociales no se habría cumplido, porque para eso necesitaban modificar la Carta Magna, pero esos cambios sólo pueden efectuarse con mayoría calificada en las dos cámaras del Congreso de la Unión, y en Senado no hubo modificación.
Y si a pesar de todos sus esfuerzos y costosas campañas no alcanzaron ni la mayoría simple en la Cámara de Diputados, menos hubiesen podido reunir la calificada. Pero, al parecer, no sabían que eso tampoco les habría bastado para cumplir su cometido.
