*Conceden amparo a Mario Marín.
De la Redacción
El tribunal colegiado del Poder Judicial Federal con sede en Cancún, Quintana Roo, dio la razón a quienes critican a ese Poder y al sistema de justicia entero en nuestro país. Amparó a Mario Marín, exgobernador de Puebla, contra el auto de formal prisión por tortura en contra de la periodista Lydia Cacho, quien fue detenida, encarcelada y maltratada físicamente (torturada) por haber escrito un libro de denuncias sobre una organización de pederastas en la cual participaban el propio Marín, senadores y grandes empresarios liderados por Jean Succar Kurí, conocido como el “rey de la mezclilla”.
Policías de Puebla capturaron a Cacho en Quintana Roo y la llevaron a Puebla. Posteriormente en una grabación de llamada telefónica Mario Marín reconoció la aplicación de tortura contra la periodista.
Le avisó al empresario Succar Kuri que ya le había dado una lección a la escritora. En su momento, hace 16 años, las autoridades judiciales determinaron no ejercer acción penal contra el político poblano, pero después de años de lucha el expediente fue consignado y un juez dictó orden de aprehensión por tortura, cumplimentada en Acapulco.
Recibió auto de vinculación a proceso, pero solicitó amparo, y el tribunal colegiado -con un razonamiento que justifica esa mala imagen del Poder Judicial Federal- resolvió que la confesión de Marín sobre las tortura a Cacho no prueba que haya existido tal, ni mucho menos que él las hubiera ordenado, pues se refirió al sujeto víctima del abuso descrito como “esa vieja” y, según la conclusión de la juez, en México esa palabra se aplica a las ancianas o mujeres de la tercera edad, lo cual no era el caso de la periodista y escritora, entonces muy joven.
También falló en el sentido de que no se probó que Lydia Cacho hubiera sido encarcelada por escribir el libro en que denunció a la organización de pederastas.