*Antes de que pasará a manos particulares, esas instalaciones las ocupaba la policía de Toluca.
De la redacción
Como en esas películas surrealistas, un particular puso en renta un módulo de seguridad que construyó y por décadas perteneció al gobierno del Estado de México aquí en Toluca. Nadie ha informado cómo fue que las instalaciones policiacas se privatizaron.
Se trata del inmueble localizado en la esquina de Avenida Pino Suárez y Paseo Matlatzincas, a cinco cuadras del Palacio de Gobierno, cerca del mercado “16 de Septiembre”, en una de las zonas de más alta incidencia delictiva de la capital del Estado.
Ahora luce una manta con el anuncio de ‘Se renta para locales comerciales’, pero no ha encontrado quien alquile las que fueron instalaciones policiacas, cuyo propósito era garantizar la paz y tranquilidad de la población toluqueña en esa zona.
Poco antes de que esa construcción fuera privatizada, la ocupaba la Policía de Toluca. Había patrullas y personal uniformado, pero de buenas a primeras la abandonaron. El módulo fue cercado con malla ciclónica, y aparecieron letreros con el aviso de “propiedad privada”. El módulo lo construyó el gobierno de Alfredo del Mazo González (qepd), y formó parte de acciones semejantes en muchos municipios del Estado, en el programa denominado “Tecalli”, destinado a elevar los niveles de seguridad con el acercamiento de los policías a la sociedad.
Como ese módulo de seguridad fue ocupado durante años por la Policía Municipal de Toluca, se pensó las instalaciones pertenecían al ayuntamiento, pero después de que el particular cercara el predio, incluida la construcción, el entonces alcalde Fernando Zamora Morales informó a “El Espectador” que fue al gobierno estatal a quien le arrebataron el “Tecalli”.
Sorprende que el inmueble construido por el gobierno estatal y ocupado durante décadas haya tenido un dueño particular. Presumiblemente era propietario del predio y logró ‘recuperarlo’ con todo y construcción, sin que autoridad alguna diera seguimiento al caso o defendiera la propiedad pública del inmueble. Hoy ese particular puede presumir ser dueño de instalaciones policiacas y rentarlas, algo poco frecuente. Ha habido casos donde particulares recuperan terrenos de los cuales se apoderaron las autoridades sin cumplir la ley, pero no se conoce otro de instalaciones policiacas.
Nada más falta que, en el colmo del surrealismo, al final, sean las autoridades quienes se conviertan en inquilinas para destinarlas a la policía.