CALDERÓN CREÓ ESO DE TESTIGOS
PROTEGIDOS, Y LLEGÓ A TENER 379
Huixquilucan, Méx., a 20 de octubre de 2021
Lic. Edgar Augusto Lozano Robles
Presidente editor de “El Espectador”.
La soberbia, prepotencia, arrogancia, torpeza e insensibilidad del ex director general de PEMEX, Emilio Lozoya, quien fue grabado en un lujoso restaurante, cuando está acusado de delitos graves y anda libre porque colabora con las autoridades en casos de corrupción de políticos, fue aprovechado para hacer escándalo encaminados a desprestigiar las imputaciones a los corruptos y atacar al gobierno del presidente López Obrador.
Me atreví a escribirle porque entre quienes criticaron al gobierno por lo de Lozoya estuvo el ex presidente Felipe Calderón. Soy abogado penalista y conozco bien el tema de los “testigos colaboradores”, una figura jurídica que instituyó el propio Calderón, en junio de 2012. Antes no existía.
Al cierre de su sexenio, Calderón llegó a tener 379 “testigos colaboradores”, que eran, como en el caso de Lozoya, delincuentes confesos y por eso conocían a otros delincuentes y sus actos criminales. Algunos testigos lo fueron varios a años. Sé esto porque tengo amigos que defendieron antes a esos testigos.
No sólo andaban libres, protegidos por policías, sino les daban casas para ellos y su familia, dinero para vivir, incluso si decidían irse al extranjero.
En un municipio cercano al mío, en las plazas comerciales de Lerma, ejecutaron a uno de esos testigos protegidos. También andaba libre y comiendo en un restaurante. Pero, al parecer, ya le habían retirado los escoltas. Creo que más bien Lozoya debería cuidarse porque puede ser “silenciado” por los intereses económicos y políticos mezclados con criminales, que está afectando como testigo colaborador, como ocurrió con el caso que le comento, de mayo de 2015 en Lerma.
Le agradezco la publicación de mi carta, porque creo que en la opinión pública quedó la impresión de que Lozoya es el primer testigo colaborador en México y que, por ser delincuente confeso, sus imputaciones en contra de otros políticos delincuentes no deben ser tomadas en cuenta por la justicia. Y lo más inexplicable es que Calderón criticó al gobierno, cuando fue él quien expidió la ley para proteger testigos delincuentes: “Ley Federal para la Protección a Personas que intervienen en el Procedimiento Penal”.
Abogado penalista Juan Luis Zetina Mondragón.