*No aplicó el exalcalde los principios de la cuarta transformación.
De la redacción
El ahora ex cuarto regidor de Toluca, Arturo Chavarría Sánchez, culpó al exalcalde Juan Rodolfo Sánchez Gómez de haber protegido la corrupción de los gobiernos priistas, por no denunciarla.
Controvertido político, perseguido y preso por denunciar la corrupción presentada cuando se construyó el hospital del ISSEMYM, en Paseo Tollocan, de Toluca, Chavarría Sánchez no se quedó con las ganas de insistir en sus denuncias, antes de terminar el período del cabildo.
Sostuvo que desde que inició la administración de Sánchez Gómez denunció la corrupción encontrada y el estado ruinoso en que el primer gobierno de izquierda de Toluca encontró la administración.
Y demandó que se hicieran auditorías para esclarecer los actos corruptos e incluso presentó una solicitud similar ante la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) de la anterior Legislatura, pero Sánchez Gómez nunca quiso proceder contra los gobiernos municipales anteriores,
Traicionaron los principios de Morena el ahora ex acalde, quienes fueron sus directores, los asesores de Sánchez Gómez y los secretarios del ayuntamiento, Ricardo Bastida Morena y Carlos Sánchez. “Fueron ineficaces y no combatieron la corrupción”, recalcó.
Hace meses Chavarría denunció conflictos de intereses en la comuna que encabezó el ex panista disfrazado de morenista, pues una empresa de un director general del área de desarrollo urbano tenía contratos con el ayuntamiento, obtenidos por adjudicación directa.
El ex cuarto regidor de Toluca destacó que Sánchez Gómez protegió la corrupción perpetrada con “obras fantasmas”, como las que presuntamente se realizaron en la Unidad Deportiva de San Mateo Otzacatipan.
No investigó lo ocurrido, y por un reclamo por esos supuestos trabajos, que inicialmente representaba 5.4 millones de pesos de pesos, al final la suma se elevó hasta los 26 millones de pesos.
El ex edil se refirió al sonado caso de una empresa que reclamó pagos por trabajos no realizados, según las administraciones de Martha Hilda González Calderón y Fernando Zamora, pero que Sánchez Gómez reconoció y al final pagó con un terreno del ayuntamiento, que vale 44 millones de pesos, pero lo tomó la empresa en poco más de 22 millones, por lo que todavía exige le cubran el supuesto faltante de 4 millones.
