De la Redacción
Las ejecuciones de los periodistas José Luis Gamboa, el 10 de enero; de Margarito Martínez, el 17 de este mes; y el 23 siguiente, de Lourdes Maldonado, dos de ellas en Baja California, motivaron movilizaciones de informadores profesionales en muchas ciudades del país, incluyendo Ecatepec y Toluca, para exigir el cese de las agresiones morales y hostigamiento a los periodistas y justicia para las víctimas.
En esta capital mexiquense a la exigencia de castigo para los asesinos de los tres periodistas, se agregó el reclamo por el fin de la impunidad de los homicidas de los periodistas Nevith Condés, en 2019; de Enrique García, en junio del año pasado, en Toluca; y el secuestro, robo, allanamiento de morada y amenazas de muerte a Teresa Montaño.
No hay castigo para los culpables, ni información sobre avances de las investigaciones, a pesar de que en el caso de Condés su ejecución va para tres años.
Las movilizaciones de periodistas por primera vez incluyeron el reclamo de mejores salarios y condiciones laborales para los periodistas, lo cual no examinan los grandes medios informativos, quienes se ocupan de las ejecuciones, sin contextualizar las condiciones de ingresos, bienestar y calidad de vida de las víctimas y sus familias.
El gobierno federal envió a Baja California un equipo interinstitucional, para colaborar con las autoridades estatales en las investigaciones, esclarecimiento y castigo a los culpables de la ejecución de Margarito Martínez y Lourdes Maldonado.