El Asunto del famoso Testamento.
Jairo A. Tell
No cabe duda de que cualquier oportunidad es buena para confundir y desorientar a la población. Así lo han manifestado y así lo han hecho quienes durante décadas hicieron uso y abuso de su estrecha relación con el poder público. Quienes ahora lloriquean porque no reciben su acostumbrada tajada del pastel, apuestan a la más mínima falla del gobierno en turno para hacer leña del árbol caído. Su apuesta principal es la de ver cristalizada su embestida con la destitución de algún funcionario de alto rango y ya de menos un funcionario de medio pelo.
Nadie se llame a sorprendido cuando los reflectores apuntan a la maestra Delfina Gómez titular de la Secretaria de Educación Pública, la razón según ellos es simple, el haber pasado la charola para beneficiar al movimiento de regeneración nacional cuando fue edil de Texcoco; pero no solo es ella, en su momento también fue Jesús Ramírez Cuevas encargado de comunicación social de la presidencia, también Jenaro Villamil quien dirige el asunto de radio y televisión del estado, Manuel Bartlett; así como también es y seguirá siendo objetivo el Subsecretario de Salud Hugo López Gatell por el asunto de la pandemia y de la distribución de vacunas.
Andrés Manuel López Obrador es un viejo lobo de mar y ha sabido atajar de botepronto todos los misiles en contra de su gobierno, por ello no sería raro que el asunto de su chequeo médico haya servido para distraer la atención sobre otros asuntos; los detractores ipsofacto en una especie de nado sincronizado propagaron la idea de la precaria salud del mandatario y se frotaban las manos esperando que el mandatario enfermara de gravedad. Les salió mal el cálculo pues de inmediato mediante sus redes sociales López Obrador desmintió la versión. Capitalizar estos eventos es algo que se le da muy bien. El asunto del famoso testamento fue algo que produjo escozor entre los malquerientes del presidente y puso a imaginar un escenario catastrófico una vez que este ya no estuviera, pero como dicen en mi pueblo “Se les aguo la fiesta” pues aun con el Omicron a cuestas López Obrador realizo cambios en su gabinete y siguió dirigiendo todos y cada uno de los asuntos importantes, necesarios para la buena marcha del gobierno.
En otro orden de ideas, cada vez es más frecuente y más evidente la desesperación que manifiestan los miembros del PRIAN-RD, quienes lejos de aplicarse y elaborar un plan perfectamente definido y concienzudo, solo atinan a denostar, calumniar, algo que definitivamente no escapa al razonamiento generalizado de la población. ¿De quien van a salvar a México?, De quien ha hecho todo lo posible por revertir el grado de desigualdad de la población. Porque ahora se dan baños de pureza y olvidan olímpicamente toda la gama interminable de tropelías que hicieron por más de 5 décadas. Para acabarla de amolar, sus principales representantes y figuras políticas cargan sobre sus espaldas un costal tan pesado y negro que les resta toda credibilidad. De refilón, estos políticos dejan muy mal paradas a las universidades extranjeras como Harvard o Cambridge, por mencionar algunas, pues lo único que aprendieron fue a robar.
Instituciones de “prestigio” como el ITAM, la IBERO, y el Tec. de Monterrey también quedan muy mal paradas. Ni que decir de las universidades “patito” como aquellas en las que estudio Samuel García, el flamante gobernador de Nuevo León, burro hasta la pared de enfrente. Uno no se explica cómo las grandes compañías de radio y televisión, así como de la prensa escrita siguen contratando a personajes deleznables faltos de toda credibilidad que se autodefinen como líderes de opinión cuando en realidad son unos madreadores del sistema para tratar de ablandarlo y así permitir el regreso al pasado como ellos mismos afirman. Caray. pienso en las escuelas donde estudiaron Xóchitl Gálvez, Kenia López Rabadán, Lili Téllez, Marko Cortes, Alito Moreno, y Samuel García son unos fregones (Nótese mi sarcasmo) pues la preparación que tienen les da para opinar de Salud, Energía, Economía, Ecología, Astronomía y hasta de Epidemiologia. No, si este mundo es una bola de agua y tierra y en ese mundo de Los Fox, Calderón, Peña Nieto las cosas estaban mejores con una deuda creciente y una corrupción a todo lo que daba, Hasta el más chimuelo mascaba tuercas: el mundo al revés .
