*Pemex tenía ya el 49.99 de acciones y adquirió el resto para ser dueño total.
De la redacción
El gobierno mexicano y el país avanzan en su estrategia de lograr la autosuficiencia en gasolinas. Con la compra de la refinería Deer Park, de la cual PEMEX tenía ya el 49.99 por ciento de las acciones, y se convirtió en dueño absoluto de la misma y podrá disponer libremente de los combustibles producidos por la planta.
Petróleos Mexicanos (Pemex) informó el día 20 de este mes de la conclusión del proceso de negociación y pagó de cerca de 600 millones de dólares por el 51.1 por ciento que su socio, la empresa “Royal Dutch Shell” tenía en el complejo de refinación, el cual incluye una planta petroquímica.
La empresa pública mexicana dispondrá de los 131 mil barriles diarios de gasolinas: 90 mil de diésel, 25 mil de turbosina (utilizado por los aviones) y otros volúmenes menores de subproductos elaborados por Deer Park.
La refinería adquirida tiene capacidad para refinar 320 mil barriles diarios de crudo, y actualmente ocupa el 85 por ciento de su capacidad instalada; opera los 365 días del año, las 24 horas del día. Está ubicada en Dallas, Texas y está por cumplir 20 años de su construcción en 1993.
La operación de compra-venta, a pesar de su trascendencia, ha sido minimizada por la casi totalidad de los grandes medios informativos de alcance nacional, todos ellos o en su gran mayoría opositores al gobierno de la República. Informaron del hecho, pero sin contextualizarlo ni, mucho menos, destacar la importancia del logro.
Al día siguiente de la adquisición, el propio presidente Andrés Manuel López Obrador mostró su satisfacción por el éxito de la operación y el avance en el objetivo de lograr la autosuficiencia en los productos refinados, provenientes del crudo.
Recordó además que, para finales del 2024, se podrá disponer con producción propia suficiente de gasolinas para satisfacer el mercado nacional, con el consiguiente ahorro de divisas, porque ya no se importará, se garantizará la seguridad nacional en el tema.
El mandatario se refirió a una situación escasamente examinada por los analistas y los expertos en el tema: la soberanía energética, específicamente la seguridad y soberanía en combustibles. “Es un asunto de seguridad nacional”, advirtió en su conferencia mañanera del 21 de este mes.
Explicó que el abandono de una política petrolera nacionalista durante 36 años ocasionó una alta dependencia de México respecto de las gasolinas de Estados Unidos, lo cual coloca actualmente al país en una alta vulnerabilidad en su seguridad nacional.
Dijo que nada más es cuestión de reflexionar sobre lo que pudiera ocurrir en un momento si por alguna razón las compañías petroleras estadounidenses cortaran el suministro de gasolinas y diésel.
México quedaría paralizado, porque todo se mueve con combustibles, por ello garantizar la producción suficiente de los mismos es un asunto de seguridad nacional, por todo cuánto representan para la población y el desarrollo del país.