De la Redacción
La renuncia de Alejandra del Moral a la dirigencia estatal del PRI ha generado un sinnúmero de especulaciones, desde las que la ubican próximamente en una posición relevante en el gabinete estatal, hasta aquella de que quiere dedicarse desde ya a buscar la candidatura para gobernadora, sin tener la atadura del cargo, lo cual la hubiera convertido en juez y parte en la lucha interna.
Sea una u otra la razón, lo cierto es que nadie deja por gusto una posición de liderazgo tan relevante como la que tenía en el CDE la ex alcaldesa de Cuautitlán Izcalli, y que ser cabeza del partido en uno de los estados en donde el tricolor tuvo mayor recuperación electoral en junio del año pasado es más importante que ser titular de una secretaría de escasa relevancia.
Sea como sea, de lo que sí no hay duda es de que se trata de un movimiento y reacomodo de los grupos internos priístas mexiquenses con miras a la lucha interna por la candidatura del 2023 para la titularidad del Poder Ejecutivo estatal.