*Los festejos fueron suspendidos en 2021 por la pandemia y se realizaron hasta este año.
De la Redacción
Muchas críticas se hicieron al ayuntamiento de Toluca por la falta de actos importantes conmemorativos de los 500 años de la fundación de la ciudad, el pasado 19 de este mes. Tienen razón. La efeméride pasó desapercibida, pero socialmente hablando los problemas de los aproximadamente 900 mil toluqueños son otros.
La demarcación no tiene una eficaz seguridad pública porque ni siquiera cuenta con patrullas; el ayuntamiento carga una pesada deuda con bancos, proveedores de bienes y servicios y contratistas, además de escasez de presupuesto para darle mantenimiento preventivo y correctivo a la infraestructura urbana.
Las calles están en mal estado y, adicionalmente, la población abandonó sus antiguos hábitos de limpieza de los frentes de sus casas y tampoco cuida la limpieza de las calles, pues arroja basura por todas partes, lo cual ocasiona que la ciudad esté sucia.
Otro grave problema social es la pérdida del sentido de respeto, solidaridad y consideración para con los conciudadanos, y ha llevado a que sea la ciudad con mayor índice de rijosidad entre sus habitantes pacíficos (los criminales son otra cosa).
La sociedad toluqueña extravío el sentido de comunidad, como consecuencia de su acelerado crecimiento demográfico, generado por los grandes flujos poblacionales, que no se integraron a la sociedad con sentido de pertenencia. Todos estos factores negativos se conjugan y están presentes a 500 años de la fundación de la capital mexiquense, y ni siquiera foros se organizaron para atender este problema urgente de análisis y solución.