*También han encontrado inmuebles donde guardan mercancía robada con violencia.
De la redacción
Casi todos los días la Secretaría de Seguridad Pública estatal da a conocer la recuperación de vehículos, mercancías y otros productos robados. Los encuentran generalmente en predios.
En algunos casos, los menos, detienen a los presuntos culpables cuando intentan escapar o generalmente custodian los inmuebles mientras obtienen las órdenes judiciales de cateos. Con mucha frecuencia ocurre esto.
No obstante, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), ni la dependencia policiaca ha dado a conocer si aplica o no la legislación de extinción de dominio a las propiedades donde se encuentran automotores y otros bienes robados.
La legislación penal autoriza a las instituciones de la materia a aplicar la extinción de dominio a todo instrumento del delito; es decir, a todo lo utilizado para cometer un ilícito o para ocultar un bien robado; sobre todo, cuando hay indicios de que un predio es utilizado regularmente para guardar lo robado.
Lo mismo aplica para los vehículos empleados para cometer robos, asaltos, secuestros, extorsiones o ejecuciones, pero hasta no hay in formación respecto si las autoridades estatales competentes confiscan los predios baldíos o construidos, utilizados para ocultar lo que se roban los delincuentes.
La legislación aplicable se aprobó, precisamente, para debilitar la infraestructura física de los delincuentes y lograr la reducción de su capacidad para hacer daño a la sociedad, como son los inmuebles utilizados para guardar y ocultar lo robado.
El mismo objetivo tiene la aplicación de la extinción de dominio de vehículos utilizados para cometer delitos, desde el robo de otros vehículos, a bancos, a transeúntes, asesinar, secuestrar, extorsionar, cobrar derecho de piso y traficar drogas, ilícitos perpetrados con el empleo de coches, camionetas y motocicletas.
No siempre las unidades automotoras usadas son robadas, sino también se emplean vehículos de propiedad legal de los delincuentes, por ello cuando se les captura en flagrancia esos vehículos deben ser decomisados y pasar a propiedad del gobierno.
A pesar de esto, no hay información oficial sobre el destino de los predios cateados y asegurados por guardar bienes productos del robo, la mayoría con violencia. No se ha dado a conocer con precisión si han hecho valer la extinción de dominio en todos o en algunos casos de inmuebles y vehículos que evidentemente constituyen instrumentos del delito.