*Gustavo Petro fue guerrillero, pero del grupo menos violentos y nunca disparó.
De la redacción
Los medios informativos de Colombia, propiedad de la derecha y ultraderecha, comenzaron una campaña de desprestigio contra el candidato presidencial de la izquierda, Gustavo Petro, de cara a la elección del 29 de mayo próximo.
A pesar de ser senador, de haber sido alcalde y abandonado la lucha armada hace décadas, lo presentan ahora casi como terrorista, según lo que publican a diario los medios informativos, para debilitar y frustrar sus posibilidades de triunfo o impedir que obtenga más del 50 por ciento, para así obligarlo a ir a una segunda vuelta, el 19 de junio siguiente.
Por la campaña mediática en su contra, fuera de Colombia se piensa que el ahora abanderado presidencial de la izquierda fue miembro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) o del Ejército de Liberación Nacional (ELN), las legendarias guerrillas rurales.
El propio Petro recordó que en realidad fue cuadro del M-19, una organización guerrillera urbana, que tuvo pocas acciones militares y que él nunca disparó un fúsil, aunque lo llegó a portar. “No se ofreció, pero si hubiera sido necesario habría combatido”, comentó hace poco.
Tenía entonces 16 años y su función era la de enlace del grupo armado con las organizaciones civiles y especialmente participaba en la redacción de comunicados de prensa en que daba cuenta de las actividades del M-19.
En la las elecciones internas de los partidos y coaliciones efectuadas el 13 de marzo pasado Gustavo Petro arrasó y obtuvo 4.4 millones de votos, más del doble del ubicado en segundo lugar, Federico “Fico” Gutiérrez”, un derechista que obtuvo 2.1 millones de sufragios en esa especie de elecciones primarias.
Ahora. Al mismo tiempo que se hace campaña contra Petro, las organizaciones de derecha y ultraderecha se están uniendo en torno a Gutiérrez, de cara a la primera vuelta de la elección presidencial del 29 de mayo.
La alianza anticipada de la derecha busca cual impedir que el senador Gustavo Petro gane la mayoría en la primera vuelta, para obligar a la segunda ronda de votaciones, que se efectuaría el 19 de junio.
Esta elección interesa mucho al gobierno de Estados Unidos, a cuya embajada en Bogotá atribuyen la campaña de desprestigio contra el abanderado izquierdista, pues los gobiernos derechistas, particularmente el actual de Iván Duque, son peones de los estadounidenses en la región y orquestadores de las conspiraciones derechistas contra el gobierno venezolano. De ahí las maniobras para evitar el triunfo de Petro.