*No sorprendió la derrota: Saúl Álvarez no es semicompleto y Bivol, sí.
De la redacción
Dmitry Bivol propinó a Saúl “Canelo” Álvarez la mayor golpiza de su carrera profesional y su segunda derrota. El tapatío tenía sólo un fracaso, pero Floyd Mayweather le ganó todos los rounds casi con puras cachetadas, pues no pega y no lo lastimó, como sí, lo hizo el ruso.
A los conocedores de boxeo no sorprendió la derrota del “Canelo”, porque peleó en un peso superior: el semicompleto, y él no da ese tonelaje, más que con exceso de grasa, como ocurrió y que le hizo perder rapidez y potencia, y evidenció un defecto que ya había superado: su cansancio extremo después del quinto round.
Bivol es un peso semicompleto bueno, como lo muestra su record de invicto, ahora de 20 combates, de los cuales 10 fueron exitosas defensas. La mitad de sus peleas han sido de defensa de su título, y si se incluya a la en que lo ganó, son 11 las de jerarquía campeonil.
El “Canelo” ha enfrentado a muchos boxeadores de mayor estatura que él, pero no eran tan buenos como el ruso. Los dos campeones supermedianos que derrotó no supieron aprovechar su ventaja de mayor estatura y alcance, como si lo hizo Bivol, que lo mantuvo a raya en la larga distancia.
Lo hizo fallar mucho y lo hizo evidenciar en sus limitaciones y deficiencias técnicas. Sus golpes no son ejecutados con perfección, y en esta pelea, además de débil, se vio lento, sin puntería y con una frágil defensa, por lo que fue víctima de los rápidos, certeros y potentes golpes rectos que vulneraron la defensa del mexicano.
El ruso supo aprovechar la ventaja de sus largos brazos, y sólo porque no sabe golpear al cuerpo llevó el combate a los 12 rounds. De lo contrario, el mexicano hubiera perdido por nocauts, a pesar de su probada resistencia o aguante.
Al final el “Canelo” cometió otro error al reclamarse ganador, cuando todos los aficionados al box vieron como Bivol fue superior y le ganó casi todos los rounds, aunque los jueces, tal vez en una estrategia para una revancha, le dieron 2 puntos de ventaja al ruso, quien tiene pocas peleas profesionales, pero muchas en amateur.