*El tirunfo conjugó una serie de factores imposibles de replicar en la elección de gobernador.
De la Redacción
El inesperado triunfo del PRD en Atlautla, pequeño municipio del oriente del Estado de México, alienta a los sectores mexiquenses de ese partido a impulsar que el próximo año presenten candidato propio a gobernador, en virtud de que le fue mal el año pasado por aliarse al PRI y al PAN, aquí y en el país.
Perdió los municipios más importantes que gobernaba, como Nezahualcóyotl y Tultepec, pero de acuerdo con sus cuadros estatales, lo peor es que perdió identidad ideológica al unirse a sus dos principales partidos adversarios. Su triunfo del día 15 de este mes lo obtuvo con un militante del PAN, quien fue descartado por la alianza PRI-blanquiazul, quienes repitieron a la candidata que perdió en la elección ordinaria de junio del año pasado.
Nadie esperaba que el PRD ganara Atlautla, porque en la elección ordinaria sólo alcanzó 505 votos, y ahora con cerca de 4 mil sufragios derrotó a las coaliciones formadas por el PRI-PAN y Morena y sus aliados. Por cierto, Morena, que ganó la elección ordinaria, después anulada, ahora quedó en cuarto lugar, superado por el PRD, PRI-PAN y Redes Sociales Progresistas. Cambió de candidato. Sustituyó al que había ganado y postuló a otro que no tuvo aceptación.