De la Redacción
Muy comprometida quedó la posición jurídica de Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, dirigente nacional del PRI, denunciado por delitos electorales. En un audio se le escucha ordenar a un colaborado a extorsionar empresarios y confiesa que una de las compañías más importantes de salas de cine entregó 24 millones de pesos para 12 campañas de diputados en Michoacán.
Su caso es más claro que el de los hermanos del presidente López Obrador, tanto por el monto, como por la confesión de que recibió ese dinero, además del destino dado al mismo: las campañas electorales del PRI, sin reportarlo al INE, como era su obligación, por lo cual pudo incurrir en delito electoral.
El monto de los fondos conjuntos recibidos los hermanos del presidente López obrador fue de 1.6 millones de pesos y no hay reconocimiento expreso de que eran para campañas, ni involucra el delito de extorsión, cómo sí lo es el caso de “Alito”, quien insiste en ser candidato presidencial en 2024, incluso adelanta que ganará el cargo, a pesar de que en el 2021 y como dirigente perdió 8 gubernaturas que tenía el PRI en su poder; es decir, todas las que estuvieron en disputa.
Se ve difícil que pueda desvanecer los cargos formulados en su contra por delito electoral, y se verá envuelto en un escándalo (los medios informativos podrían protegerlo). Por si fuera poco, también se sabe que es investigado por su enorme fortuna acumulada durante el tiempo en que gobernó Campeche.
¿QUÉ TAN AMIGO EL FUEGO?
Tratándose del líder nacional del PRI, con declaradas intenciones de buscar la presidencia, la filtración de los audios ha dado pie a especulaciones sobre la fuente. Se dice, quizás con razón, que el únicos que no ganarían nada ventilando un asunto como este es el partido en el poder; es decir: MORENA. Es más, las intenciones presidenciales de ‘Alito’ le resultan conveniente, pues su nombre en la boleta presidencial facilitaría la permanencia de éste partido en el poder federal, y por ‘efecto halo’, un triunfo contundente en las elecciones concurrentes.
De esta suerte, la fuente de las grabaciones tendría por lógica que ubicarse como ‘fuego amigo’ y, como siempre, ya se comienzan a manejar hipótesis de los autores. Faltan dos años para la elección, y ya se mueven todos en el tablero.
