*La comunicadora ha denunciado diversas irregularidades en el desarrollo inmobiliario de P.V.
De la Redacción
La periodista Susana Carreño, apuñalada en Puerto Vallarta, Jalisco, en circunstancias extrañas porque las autoridades de ese estado de inmediato dijeron se trato sólo de un asalto, se recupera de sus heridas. La informadora profesional es directora de la radiodifusora de la Universidad de Guadalajara y es luchadora social, especialmente denuncia los cambios de uso de suelo, las construcciones de grandes edificios sin estudios de impacto ambiental, la corrupción y tráfico de influencia la expedición de permisos de construcción en área vedadas al uso habitacional, y el saqueo del sistema de pensiones estatal.
Sus acusaciones las ha hecho en las conferencias mañaneras del presidente Andrés Manuel López Obrador, por lo que sus compañeros no creen en la hipótesis del asalto; sobre todo, porque había sido atacada dos veces antes. Sospechan se trató de una agresión deliberada, disfrazada de asalto, y una represalia por sus denuncias.
Las autoridades jalisciense apoyan su presunción del asalto como móvil del ataque a la periodista porque los agresores, además de robarla se llevaron su camioneta, pero sus colegas aclaran que eso ocurrió porque el vehículos de los criminales se descompuso y utilizaron el de la víctima para escapar.