*Con dinero de procedencia ilícita e intimidación evitaba que revelaran actos delictivos.
De la redacción
En su época de inmenso poder y vínculos con los grandes carteles del narcotráfico, Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública federal y hombre de todas las confianzas del presidente Felipe Calderón Hinojosa, aplicaba una estrategia combinada para controlar a los medios informativos y periodistas:
Los corrompía con grandes sumas de dinero o los hostigaba e intimidaba, para que silenciaran los vínculos de éste con los jefes de los poderosos carteles de las drogas, de acuerdo con información contenida en grabaciones del gobierno estadunidense.
García Luna está preso ahora en Estados Unidos, acusado de graves cargos de protección a narcotraficantes a cambios de maletas llenas de dólares, que le permitieron acumular una inmensa fortuna, incluyendo mansiones en México y Estados Unidos.
Con ese mismo dinero corrompía a medios informativos y periodistas, por lo cual durante el tiempo en que fue intocable miembro del gabinete calderonista, con excepciones, jamás se generaron escándalos por sus actividades ilícitas.
También les hacía favores a famosos conductores de noticieros de Televisión, como fue el caso de Carlos Loret de Mola, a quién le facilitó todo para hacer un montaje, que presentó como aprehensiones en vivo de presuntos secuestradores, que había sido capturados días antes y en acciones diversas.
La lista de los medios informativos y periodistas corrompidos por García Luna no se ha dado a conocer, pero fueron notorios los elogios que muchos columnistas famosos le hacían al encargado de combatir y erradicar a la delincuencia organizada, pero que en lugar de hacerlo, la protegía.
Tal vez a muchos convencía de su eficacia y por eso lo exaltaban, como es el caso de Carlos Marín, quien todavía dos años después de dejar el cargo, cuando se formaba la Guardia Nacional, sostenía que la corporación que dependía de García Luna era de las mejores del mundo.
En uno de sus programas televisivos de “Milenio”, el ex reportero de “Proceso”, semanas antes de que García Luna fuera capturado y recluido en un penal en Estados Unidos, dijo públicamente y sus televidentes son testigos, que el secretario de Seguridad de Felipe Calderón era el mejor policía del mundo.
Después de su aprehensión no ha vuelto a hablar elogiosamente del ex poderoso e intocable miembros del gabinete calderonista.