1-En el Estado de México pocas veces ocurren masacres perpetradas con saña extrema, como son noticia en otras partes del país, pero eso no indica que la delincuencia no afecte a la población, incluyendo a pequeños comerciantes, como lo probaron las protestas de habitantes en San José del Rincón, para exigir seguridad y protección ante extorsionadores organizados, como esa de la cual eran miembros algunos policías y agentes de la secretaría se Seguridad y la FGJ, detenidos hace unas semanas.
2-Ese municipio de la zona mazahua es de los más pobres del país, con alta marginación y poco dinero circulante, y los criminales muestran nula comprensión del impacto que tienen sus actividades delictivas en las familias de escasos recursos. Sus extorsionan afectan por partida doble: por el dinero que le ‘sacan’ a los negocios y por la carestía agregada a que dan lugar con el llamado “cobro de derechos de piso” a los comerciantes, quienes elevan los precios para cubrir las cuotas que en forma criminal les fijan los grupos delincuenciales.