*Suma el mexiquense su segunda derrota en pocas semanas.
De la Redacción
Habrá que esperar para conocer la reacción del senador mexiquense Higinio Martínez, después de perder la elección interna de los senadores de Morena para presidir la mesa directiva de la Cámara Alta del Congreso de la Unión a partir de mañana, en relevo de su correligionaria Olga Sánchez Cordero.
El legislador mexiquense obtuvo 28 votos, pero su competidor, Alejandro Armenta, de Puebla, alcanzó el apoyo de 36 senadores, con lo cual aseguró el cargo directivo, puesto que Morena y sus aliados tienen amplia mayoría, suficiente para sacar adelante su candidatura, sin necesidad de los votos de los opositores. El trámite al pleno fue eso, simplemente, aunque los senadores de oposición criticaron que no se haya buscado el consenso.
Higinio sumó su segundo tropiezo en pocas semanas, pues también perdió ante Delfina Gómez Álvarez las encuestas para coordinar los comités de defensa de la cuarta transformación en suelo mexiquense, paso previo para obtener la postulación para la gubernatura.
En estas condiciones, el próximo domingo hará valer el control que tiene sobre la estructura directiva estatal de Morena e impondrá dirigentes del Comité y del Consejo Consejo estatales de Morena. La nueva derrota tendrá efectos buenos o malos en el ánimo del político texcocano. Es probable que quiera reforzar su control sobre la estructura partidista en el Estado de México, para estar en condiciones de negociar posiciones en el Poder Ejecutivo si Gómez Álvarez gana la gubernatura.
Morena tiene en su interior el riesgo de perder, porque el grupo hegemónico, que no tiene mucho apoyo fuera del partido, puede boicotear los trabajos de integración de los comités de defensa de la cuarta transformación en la entidad y/o no respaldar la campaña electoral de la ex secretaria de Educación Pública, con lo cual favorecería al PRI y a la coalición que encabezará.