*En su momento ninguna de las modificaciones legales despertó el rechazo de los medios.
De la Redacción
La campaña mediática contra el presidente Andrés Manuel López Obrador por el caso de la prisión preventiva oficiosa o justificada y por la obligación de radiodifusoras y televisoras a aclarar en sus noticieros qué material es noticia y qué, opinión, prueba una vez más la mala fe de los grandes medios informativos.
En el primer caso aseveran que el mandatario quiere encarcelar a inocentes, pero el caso es que esa reforma la impulsó Felipe Calderón y se aprobó en 2008.
La reforma en favor de los televidentes y radio fue promovida y aprobada en 2017, cuando gobernaba Enrique Peña Nieto, pero culpan de su contenido a López Obrador.