*La empresa vendió seguros al gobierno por 108 mil mdp en 15 años.
De la redacción
La privatización de la “Aseguradora Hidalgo”, propiedad del gobierno federal, constituye una prueba más del saqueo de fondos públicos que significó la entrega de empresas del gobierno a la iniciativa privada.
En 2003, el presidente Vicente Fox Quesada desincorporó o enajenó, como con eufemismo en el lenguaje tecnocrático se le dice a la entrega de bienes de la nación a particulares, la citada afianzadora.
La compradora fue la compañía MetLife, quien tan sólo entre el 2003 y el 2012 -es decir, medio sexenio de Fox Quesada y el período completo de Felipe Calderón- obtuvo contratos del gobierno federal por 82 mil millones de pesos; más de nueve veces los que pagó al gobierno por “Aseguradora Hidalgo”, de acuerdo con información de las autoridades federales del ramo.
Con Enrique Peña Nieto como presidente el Poder Ejecutivo Federal diversificó la contratación de seguros, para beneficiar a empresarios amigos, especialmente a dueños de grandes medios informativos, y a MetLife le compró seguros por 26 mil millones de pesos, para acumular esta compañía 108 mil millones de pesos en sólo 15 años de vínculos con el Ejecutivo Federal.
Ese monto global fue sólo de contratos que la empresa que se quedó con “Aseguradora Hidalgo” obtuvo del gobierno federal, no se incluye los ingresos del sector privado, ello refleja claramente el mecanismo de saqueo que permitió la acumulación de enormes fortunas a empresarios amigos de los poderosos.
En forma inexplicable, MetLife enfrenta ahora problemas financieros, según se difundió en las secciones especializadas en economía y finanzas de los grandes los medios informativos de cobertura nacional.
Algunos expertos en estos temas consideran que a esas dificultades pudo haber contribuido la drástica reducción del gasto en seguros del gobierno encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Canceló muchos contratos, como el de gastos médicos mayores y los relacionados con el retiro del servicio público, cubiertos del presupuesto general de la federación y que incluía cirugías plásticas estéticas; es decir, para el embellecimiento de los funcionarios y sus familiares.
Aun con esta disminución del gasto público en aseguramiento (que tiene molestos a dueños de grandes medios informativos que vendían seguros mediante el tráfico de influencia), MetLife logró contratos del gobierno por más de 6 mil 500 millones de pesos en tres años y medio, para sumar, un monto de cerca de 115 mil millones de pesos del sector público federal en 18 años y meses, a través de una empresa pública que le vendió Vicente Fox en 9 mil millones de pesos.