*La falta de confianza de aficionados en un buen papel le quitará presión.
De la redacción
Con Raúl Jiménez sin posibilidades de recuperar su salud, condición física, toque de balón y visión de campo; sin seguridad de que el “Tecatito” Corona supere su lesión y en pocas semanas vuelva a ser lo que fue; con un Javier “Chicharito” Hernández vetado por el técnico y un Carlos Vela sin interés por ir al mundial, la selección partirá a Qatar sin la confianza de los aficionados en que hará un brillante papel.
A estas desventajas debe agregarse la falta de delanteros contundentes, una defensa eficaz, y una media acoplada para armar jugadas, y la excesiva veteranía de otros buenos futbolista que triunfaron en ligas europeas, pero que vieron ya pasar sus mejores tempos y no están para una competencia de alta exigencia, de acuerdo con un análisis de los especialistas en deportes de “El Espectador”.
Jugadores como Andrés Guardado, Héctor Moreno, Héctor Herrera, Néstor Araujo, Miguel Layún y otros más, a pesar de su experiencia ya no reúnen las facultades físicas para encarar con éxito un campeonato mundial de futbol, según los expertos.
El sorteo para definir los grupos del mundial favoreció a la selección mexicana de futbol, por lo que haciendo a un lado a Argentina, Polonia, con todo y tener a uno de los mejores delanteros del mundo, no es potencia mundial, como tampoco lo es Japón, por lo que no es imposible pasar la fase de grupo. .
La misma condición desventajosa en el ánimo de los aficionados mexicanos puede convertirse en un punto positivo para la escuadra, porque no llegarán al mundial con la presión que representa cargar sobre las espaldas las esperanzas de millones de aficionados sobre un gran desempeño en la justa mundialista.
No se espera que brillen y se conviertan en estrella del torneo Gallardo, Antuna, Vega, Rodríguez, Alvarado, lo que en opinión de los expertos en deportes de este medio informativo les permitirá jugar sin preocupaciones y rendir mejor, porque si no pasaran de la etapa de grupo, no habría decepción; y si lograrán llegar a la siguiente fase, darían satisfacciones.
EL DINERO COMO MÓVIL
Los mismos periodistas de deportes de “El Espectador” criticaron que la selección mexicana de fútbol o más bien, los directivos el balompié nacional se evidenciaran como excesivamente materialistas. El deporte, en general, y el fútbol, en particular, es negocio, pero debe haber límite al afán de lucro.
En este caso, los directivos optaron por los mayores ingresos; es decir, por más ganancia para la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) y por eso la mayor parte los partidos de preparación se jugaron fuera del país.
Esos encuentros de preparación sólo se vieron en México por las cadenas de televisión, y la razón es sencilla: en Estados Unidos, por ejemplo, los juegos en los estadios dejan una mayor ganancia, y no solo por el precio del boleto. Esos ingresos son mucho mayores que si se escenificaran en México.