*El periodista fue apresado por el gobierno de Díaz Ordaz. *La prensa lo atacó.
De la redacción
Durante un acto efectuado hace unos días en Mérida, Yucatán, el presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió al periodista yucateco Mario Renato Menéndez Rodríguez, dueño del diario de ese Estado, “Por Esto”.
El mandatario agradeció el apoyo que ese medio de información y su propietario le brindaron cuando era opositor y hacía giras por el sureste mexicano. En esos tiempos los grandes diarios, noticieros de radio y televisión servían al poder y “satanizaban” a la oposición.
El servilismo al gobierno llegó a tanto que atacaban, calumniaban, difamaban e inventaban delitos a periodistas críticos del poder público, como le ocurrió a Menéndez Rodríguez en el sexenio de Gustavo Díaz Ordaz, cuando llevaba dos años de fundada su revista “Por Qué”, excesivamente crítica de ese gobierno.
El periodista yucateco tenía una historia polémica por su trabajo en Venezuela y Colombia, donde había entrevistado a jefes guerrilleros, que en el caso del Venezolano Douglas Bravo, fue detenido en 1966, poco tiempo después de recibir al periodista mexicano, a quien le concedió una entrevista que publicó la revista “Sucesos para Todos” , de la cual Menéndez Rodríguez era director.
La captura de Douglas Bravo dio lugar a informaciones periodísticas, en las cuales atribuyeron al ahora dueño del diario “Por Esto” ser agente de la CIA y de haber delatado y entregado al líder guerrillero venezolano.
No obstante, la saña fue mayor por parte de los medios informativos mexicanos cuando fue detenido por presuntamente haber organizado una serie de actos con explosivos. Lo consideraron autor intelectual de los mismos y de reclutar jóvenes para las guerrillas rurales y urbanas.
El matutino “La Prensa” publicó una en su portada, a media plana, la fotografía de Menéndez Rodríguez tras las rejas, con un llamativo título de “terrorista en aprietos” y un despiadado texto que parecía haber sido dictado por los ultraderechistas de la “Guerra Fría”, porque presentaron al periodista como enemigo de la patria.
El mismo tono tuvieron las notas publicadas en todos los diarios de circulación nacional: “satanizaron” al dueño y director de “Por Qué” Y mantuvieron una campaña en su contra, hasta que después de un secuestro de un poderoso personaje por un grupo guerrillero, fue liberado junto con miembros de la guerrilla de Genaro Vázquez Rojas y enviado al exilio en Cuba.
Ese comportamiento de los grandes medios informativos era generalizado contra los periodistas críticos, y con menor intensidad continuó hasta diciembre del 2018, cuando dieron un giro de 180 grados, y los críticos del Poder Ejecutivo son convertidos en héroes civiles por medios impresos y electrónicos. Menéndez Rodríguez tiene ahora más de 80 años y está enfermo.