COORDENADAS POLÍTICAS
MACARIO LOZANO R.
ULTRADERECHA EMPRESARIAL Y OTROS PODERES
FACTICOS, BUSCAN APODERARSE DE LA SCJN
Nunca en la historia del país la ultraderecha empresarial y otros poderes fácticos afines, incluyendo el mediático habían buscado en forma abierta decidir el futuro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) como está haciendo ahora que ese tribunal constitucional elegirá presidente o presidenta el lunes próximo.
El Poder Judicial Federal y su máximo órgano colegiado siempre recibieron consignas del Poder Ejecutivo, especialmente en los tres anteriores gobiernos de este siglo, sin generar escándalos, pero en la lucha por modelo del país y por ver a quién sirve la presidencia de la República, cobró una gran relevancia de orden político, especialmente por los casos que involucran iniciativas trascendentes para los intereses nacionales, como ocurrió con la frustrada reforma constitucional de la Industria Eléctrica y la ley secundaria en el mismo tema.
La ultraderecha empresarial, que tan sólo por perdón en el pago de impuestos sobre sus ganancias incrementó sus fortunas en 366 mil 174 millones de pesos durante los gobiernos de Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, quiere atrincherarse en la SCJN, no sólo para obtener fallos favorables, aunque no le asista la razón, sino también que ese tribunal declare inconstitucionales leyes que benefician a la población, pero no a las cúpulas empresariales.
A todo se agregan los antecedentes de los poderes judiciales de Perú y Argentina, donde fueron determinantes para la destitución por un Congreso opositor, captura y encarcelamiento del presidente izquierdista Pedro Castillo; y la condena e inhabilitación de por vida para participar en política de la vicepresidenta Cristina Fernández.
En ambos casos los poderes judiciales, desde jueces hasta ministros, en su mayoría actuaron como opositores a los poderes ejecutivos, por pertenecer a la derecha. Y en ambos casos fueron manipulados por poderosos intereses económicos de la oligarquía criolla y por el gobierno de los Estados Unidos.
En este escenario latinoamericano, la ultraderecha empresarial mexicana, sus brazos electorales PRI, PAN y PRD y el poder fáctico mediático a su servicio montó y operó una rabiosa campaña en contra de la ministra Yasmin Esquivel Mossa, quien aspira a presidir la SCJN a partir del próximo lunes. Dieron por cierta una versión, según la cual, la candidata a relevar al ministro Arturo Zaldívar a la cabeza del Poder Judicial Federal copió parte del contenido de su tesis de la de otro alumno.
No está comprobado que así haya ocurrido, pero para efectos de la campaña para impedir que una candidata ajena a los intereses de los dueños de la riqueza del país sea presidenta de la Corte, eso no importa, de lo que se trata es de evitar que pueda ser electa por sus pares en la primera sesión de pleno de 2023. Tratan de que gane un ministro de su confianza, particularmente quien acepte asumir el papel de opositor, como en Perú y Argentina. La campaña es feroz en los medios informativos. La campaña presenta a la ministra como plagiaria, sin que exista un dictamen que pruebe lo del plagio.
Los medios informativos han criticado al saliente titular de la SCJN, Arturo Zaldívar, por no confrontarse con el presidente Andrés Manuel López Obrador. El ministro denunció públicamente que desde los medios quisieron obligarlo a que asumiera un papel opositor. Lo difamaron y le atribuyeron dependencia del Poder Ejecutivo, siendo que en su período fue cuando más leyes impulsadas por el mandatario fueron consideradas inconstitucionales.
La ultraderecha empresarial descalifica a Esquivel Mossa para imponer a un presidente de la SCJN incondicional y para, si fuera el caso, que el máximo tribunal constitucional del país 0pudiera actuar como lo hizo el de Argentina en el tema de Cristina Fernández. La campaña está en los medios informativos impresos y electrónicos todos los días, en una clara injerencia en un tema importante que sólo compete a los 11 ministros y ministras que integran de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.